Salud

¿Por qué soy perezoso? 15 formas de dejar de ser flojo y ser productivo

¿Qué significa ser perezoso? Ser perezoso es simplemente el deseo de ejercer un mínimo de esfuerzo para lograr objetivos. Es posible que una persona perezosa no haga ningún esfuerzo por lograr un resultado, y esto puede ser un serio obstáculo, tanto en su carrera como en su vida personal.

Hay varias formas de deshacerse de la pereza, pero cada una requerirá un poco de esfuerzo de su parte. No se preocupe: una vez que tenga una idea de las tácticas elegidas, le será más fácil mantener su actitud.

1. Acepta la pereza


Generalmente se acepta que la pereza es el peor enemigo de la productividad y el éxito. Sin embargo, luchar sin descanso contra la pereza no es tan efectivo como podría parecer. Obligarse a hacer algo todos los días conduce a un aumento de los niveles de estrés, fatiga y mal humor. Todo esto garantiza una disminución de la productividad y una baja autoestima.

Para no caer en la trampa, debes aceptar que la pereza es absolutamente normal.

2. Determinar el motivo de la pereza


Trate de encontrar la razón de su falta de motivación. Esto puede ser desafiante, pero muy importante.

Cuando comprenda qué reduce su motivación y lo hace caer en la pereza, podrá encontrar soluciones al problema.

Piensa en qué momento del día te sientes menos productivo. ¿Te vuelves perezoso cuando estás sin trabajo? Preste atención a su entorno, la hora del día, las personas que lo rodean y el tipo de trabajo que realiza.

Una fuente común de falta de deseo de hacer algo es el estrés.

3. Cambia tu horario


La pereza a menudo se debe a la costumbre. Puedes evitar esto cambiando tu rutina diaria, lugar de trabajo, equipo o simplemente vistiéndote diferente. Esto es importante si trabaja desde casa o está atrapado en la oficina. Cualquier cambio puede tener un impacto en su productividad.

4. Establezca metas alcanzables.


Las personas pueden sentirse perezosas con los objetivos demasiado establecidos.

Por ejemplo, decide comenzar a correr y establece la tarea para correr 10 kilómetros. Esta es una tarea muy difícil, incluso para un profesional. Por supuesto, procrastinarás y evitarás cumplir tu objetivo.

Ahora imagina que has reducido la tarea a una carrera de 2 kilómetros. Es mucho más fácil empezar y 2 kilómetros es mejor que 0.

Fíjese objetivos alcanzables y siéntase libre de bajar el listón si siente poca motivación.

5. Realice una tarea sencilla


Sentirse completo es un gran motivador. Una vez que hayas logrado algo, una sensación de éxito te ayudará a enfrentar una nueva tarea más desafiante.

Tome y complete una tarea pequeña y fácil antes de asumir un trabajo difícil y no deseado. Esto le dará un buen impulso. Establezca la regla de que si algo toma menos de cinco minutos, hágalo ahora.

6. Usa la técnica Pomodoro


La Técnica Pomodoro es una conocida estrategia de gestión del tiempo diseñada para ayudar a las personas a optimizar su flujo de trabajo. La esencia de la estrategia es dividir tu trabajo en acciones activas y pequeños descansos. Por ejemplo, trabaja durante 30 minutos, después de lo cual se toma un descanso de 3 a 5 minutos.

Permítase un poco de descanso después de cada período prolongado de tiempo de trabajo. Esto aumentará considerablemente su productividad y ahorrará energía.

7. Evita las distracciones


Es fácil distraerse del trabajo si su atención se centra en ver contenido de su red social favorita o si no ha visto un nuevo episodio de su programa de televisión favorito.

Aprenda a notar estos factores y trate de evitarlos.

¿Tiene la opción de desactivar las notificaciones en su dispositivo móvil? ¿O apagar el acceso a Internet por un tiempo?

8. Haz de la pereza un aliado


Es completamente normal, e incluso útil, permitirse ser perezoso. Cuando elijas ser perezoso y evitar el trabajo, aprovéchalo al máximo.

Por ejemplo, puede tomarse unos días libres si no tiene ganas de trabajar. Se ha demostrado que el descanso oportuno tiene un efecto positivo en la productividad y el bienestar.

9. Minimiza tu perfeccionismo


El perfeccionismo es el enemigo de la productividad. Esforzarse por lograr resultados perfectos en todo conduce a la fatiga, a la disminución del estado de ánimo y, como resultado, a una baja productividad. Acepta que nada es perfecto en el mundo, y esto es natural.

10. Prémiate a ti mismo


Muchas personas se sienten exitosas cuando hay una recompensa al final de un trabajo duro. Prométete una recompensa por alcanzar una meta o completar una tarea. Por ejemplo, puede complacerse con algo sabroso, comprarse algo nuevo o simplemente descansar bien.

11. Trabaja en grupo


Es más fácil mantenerse activo cuando alguien está cerca de usted. Un socio no solo lo ayudará a abordar el proyecto directamente, sino que también será una fuente de energía positiva y posiblemente algunas palabras inspiradoras.

Si no puede encontrar a alguien que lo ayude a hacer el trabajo directamente, intente llamar a un mejor amigo o familiar para hablar sobre su problema y obtener apoyo.

A veces, el apoyo de los seres queridos puede ser suficiente para ganar motivación y ganas de alcanzar las metas.

12. Estar entre personas enérgicas


El estado de ánimo y la energía tienen la propiedad de ser contagiosos. Cuando estás rodeado de perezosos que a menudo se quejan y tienden a ser pesimistas, es difícil no compartir los mismos sentimientos.

Lo contrario también es cierto, si estás rodeado de gente alegre, enérgica y motivada, tú mismo sentirás una oleada de fuerza y ​​energía. Busque a estas personas, trabaje con ellas en un grupo o simplemente obsérvelas y observe lo que hacen.

13. Establecer alertas de conciencia


Como muchas personas, es posible que ocasionalmente hayas caído inconscientemente en un estado de distracción.

Por ejemplo, puede revisar sin pensar su feed de Vkotntakte mientras se desplaza por las últimas 100 publicaciones sin siquiera darse cuenta de lo que está haciendo, o simplemente puede mirar al vacío.

Puedes combatir esto estableciendo señales de conciencia. Estas alarmas se activan a intervalos específicos de su elección, pero lo mejor de todo, al azar. Pregúntate qué estás haciendo en este momento. ¿Es necesario ahora? ¿Qué deberías hacer en su lugar?

14. Haz de la rutina un juego


Muchas empresas modernas desempeñan al menos una parte de su trabajo. Este enfoque prepara a las personas para un entorno de trabajo más enérgico y comprometido.

A la mayoría de las personas les encantan los juegos, por lo que convertir sus tareas aburridas en juegos puede hacer que se sienta más interesado en completarlas.

15. Convierte la pereza en una ventaja


Trata de usar tu pereza a tu favor. ¿Cómo? Encuentre maneras de hacer el trabajo al menor costo. Su productividad no depende de cuánto esfuerzo puso, sino de cuánto hizo.

Encuentre formas de automatizar el proceso, instale una aplicación que lo ayudará en su implementación. Este enfoque le permitirá hacer más trabajo en menos tiempo y con menos esfuerzo. También puede contratar empleados adicionales o delegar la tarea a una persona que pueda hacer mejor el trabajo.

Conclusión

Cada persona experimenta una sensación de pereza a veces.

Recuerde: la pereza y la falta de motivación no deben impedirle lograr los resultados y las metas deseadas. Encuentra el camino que funcione para ti y apégate a él.